Tal vez el titulo suene a serial de televisión, pero en realidad me estoy refiriendo a quienes tanto Umbriel como yo les debemos la vida, nuestros padres.
Hace casi tres años mis padres viajaron a la ciudad donde viven los de Umbriel, y allí se conocieron, se trataron y simpatizaron. Fue la primera oportunidad de comprobar que hasta lo inimaginable puede pasar.
Este año a raíz de la repentina enfermedad de la mamá de Umbriel en Ayacucho, nuevamente mis padres y los de él se reencontraron, esta vez en Lima, donde vivimos. Los hospedamos en casa casi tres días, justo el último día se produjo lo que quizá es el sueño para muchos, estar sentados los seis en la misma mesa departiendo y compartiendo un poquito de felicidad. Si, esa que es tan difícil de alcanzar, más esa noche se respiraba eso.
Queda en nuestra memoria ese instante, las fotos que nos tomamos los seis en la sala acreditan que no fue un sueño sino por el contrario la más hermosa de las realidades.
(Escrito por Oberón)
3 comentarios:
OH! eso si q es el sueño hecho realidad, osea quien no quisiera encontrar ese nivel de comprensión en los padres ... pero bueno uds lo tiene y eso da gusto.
Hola mi nombre es belen, Se trata de la promoción entre blogs que se sumen a esta iniciativa. Lo único que tienes que hacer es confirmarme que quiere que agregue el link de tu pagina a mi blog.Esto aumentara el trafico en tu blog. mi mail es mbelitas@gmail.com
Espero que t guste la idea, inmediatamente, si me respondes el mail te mando el link de mi directorio.
Muchas gracias
Sé de lo que habla Umbriel y Oberón yo pasé por lo mismo, el ver a mis padres con sus padres juntos en una mesa y departiendo cordialmente fue inimaginable, aún y cuanto más con las miradas cómplices de mi entonces "parthner" hoy en día nuestros padres se siguen juntado
saludos
Dr Fer
Publicar un comentario